La última entrevista del ilustrador Mikio Ikemoto con la revista japonesa V-Jump puso a Himawari Uzumaki en el punto de mira en Boruto: Two Blue Vortex. Al ser preguntado sobre una escena antigua con el personaje, Ikemoto aclaró una duda que había dividido a la audiencia: el chakra percibido por Daemon durante su encuentro estaba relacionado con el Zorro de Nueve Colas. Esta información cambia la comprensión del papel de Himawari en la trama y refuerza su conexión con el legado de Naruto.
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La revelación de Ikemoto sobre el poder de Himawari Uzumaki
Durante la entrevista, Mikio Ikemoto respondió con franqueza a una de las preguntas más debatidas entre los fans de la franquicia. Según él, Daemon percibió en Himawari no solo una poderosa energía, sino también una futura compatibilidad con el chakra de Kurama.
Este poder, aún latente, fue detectado cuando la joven se encontraba en Konoha, durante un tenso momento entre Jura y Hidari. En aquel momento, incluso sin entrenamiento específico ni signos evidentes de fuerza, Himawari exudaba un aura tan intensa que interrumpía el comportamiento hostil de Daemon.
El autor explicó que la combinación de la sangre Uzumaki de Naruto con la sangre Hyuuga de la madre de Hinata crea una base única para la compatibilidad con chakras de gran magnitud. La presencia de Kurama, aunque no se manifiesta plenamente, existe como un poder latente en la chica. Por lo tanto, los rumores de que el personaje heredó directamente el poder del Zorro de Nueve Colas ya no son meras especulaciones.
El enfrentamiento con Jura y las primeras señales del chakra del Zorro
En los capítulos nueve y diez de Dos Vórtices Azules, los lectores presenciaron por primera vez la manifestación concreta del chakra de Kurama en Himawari. En medio del caos de Konoha, la joven demostró un control parcial de una forma temprana de Jinchuuriki, el estado que se produce cuando un humano alberga una Bestia con Cola. A pesar de su falta de experiencia, logró generar una Bomba de Bestia con Cola, una técnica utilizada por Kurama y Naruto en sus combates más intensos.
La explosión de energía sorprendió no solo a los aldeanos, sino también al villano Jura. Este reconoció que la chica no era una jinchūriki común y corriente. Para él, parecía más una bestia con cola que un anfitrión. Este reconocimiento, viniendo de uno de los personajes más poderosos de la nueva fase, reforzó la percepción de que Himawari tiene un papel que va más allá de un papel secundario. Incluso sin un control total, la afinidad con Kurama ya tiene efectos prácticos en la historia.
Potencial sin explotar y el camino hacia la prominencia
A pesar de sus primeras demostraciones de fuerza, Himawari sigue siendo un personaje con un desarrollo lento. Si bien aún no juega un papel directo en batallas importantes, la hija de Naruto se está formando para su propio arco narrativo. Ikemoto no detalló cómo ocurrirá este crecimiento, pero sugirió que su compatibilidad con Kurama será esencial en momentos cruciales. Esto alimenta la teoría de que será clave para equilibrar el desequilibrio actual en el universo ninja.
La serie presenta un escenario en el que Boruto se enfrenta a un enemigo mortal y parece estar al borde de la derrota. Este desenlace potencialmente trágico plantea interrogantes sobre el futuro de la resistencia contra fuerzas como Jura. En este contexto, Himawari emerge como una figura prometedora, capaz de asumir el liderazgo de la nueva generación ninja. Su fuerza latente, combinada con su conexión simbólica con Naruto, le abre el camino para convertirse en algo más que la hermana del protagonista.