El capítulo 192 de Dandadan ofreció una intensa continuación del arco argumental que sigue a Momo Ayase y Seiko Ayase en su viaje al Gran Santuario de Izumo. Si bien las expectativas eran altas por su llegada al santuario y el avance de la búsqueda del uchide-no-kozuchi, el enfoque del capítulo sorprendió al profundizar aún más en el drama de Momo. Para aumentar la tensión, antiguos enemigos regresaron al lugar, aumentando aún más la anticipación por los próximos episodios.
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La narrativa continúa el desvío iniciado en el capítulo anterior, consolidando el fin de las luchas de Ken "Okarun" Takakura y sus aliados. Además, concluye la relación de Mika Adachi con el Orquestador, tras el error que cometió al atacar a Takeshi Murakami. Sin embargo, el verdadero impacto proviene de la revelación de que solo Jin "Jiji" Enjoji aún recuerda a Momo, lo que marca un giro oscuro en la historia.
Jiji es el único que todavía recuerda a Momo en Dandadan.
El capítulo retoma justo donde terminó el anterior, con Momo preocupada por terminar como los pigmeos, pequeñas criaturas espirituales. Jiji, consciente de la gravedad de la situación, le pregunta a Vamola si puede ver a Momo, quien estaba encaramada en su hombro. La respuesta es desgarradora: Vamola no solo no puede ver a Momo, sino que además no tiene ni idea de a quién se refiere Jiji.
Desesperado, Jiji intenta explicarle a Seiko que el estado de Momo está empeorando. Sin embargo, su abuela, para horror de los lectores, tampoco recuerda a Momo. En un esfuerzo por revivir la memoria de Seiko, Jiji incluso comenta que el grupo debería recordar por qué viajan. Sin embargo, las malas noticias no cesan: Unji Zuma apenas puede ver y Daiki Hakono no puede caminar, lo que obliga a Vamola a llevar a Zuma de la mano.
Jiji concluye que su fuerte sensibilidad espiritual le permite seguir percibiendo a Momo y le promete que, pase lo que pase, no la olvidará. La relación entre ambos cobra mayor importancia dado el olvido colectivo que se instala en el grupo.
El pasado de Zuma y la importancia de la amistad
Mientras Momo y Jiji luchan contra el tiempo, el capítulo se centra en Daiki Hakono y el pasado de los personajes. Cuando Raiya, amigo de Zuma, lo ayuda, Daiki le pregunta por qué es tan amable, recordando que al principio ambos eran hostiles. Raiya revela que, en el pasado, tras sufrir acoso, Zuma lo salvó, ya que siempre protegía a sus amigos y nunca dejaba a nadie atrás.
La historia da paso a un desgarrador flashback sobre una joven a punto de suicidarse con medicamentos recetados. Zuma y Raiya la encuentran y, aunque no saben exactamente cómo ayudarla, la acogen. Zuma reconoce que no era muy bueno con las palabras, pero elogia su capacidad para hacer reír a todos a su alrededor, algo que él mismo no podía hacer.
Este recuerdo explica por qué tantos jóvenes con problemas se unieron a Zuma: se convirtió en un refugio en medio de sus dificultades. Raiya, en el presente, refuerza la idea de que todos solo querían que alguien les dijera que estaban bien, y que Zuma representaba esa esperanza para muchos.
El regreso de la familia Kito cambia el curso de la historia en Dandadan
Justo cuando el capítulo parecía estar repleto de emociones, surge una nueva amenaza. Al otro lado del aeropuerto, miembros de la infame familia Kito atacan un autobús que transportaba prisioneros y se reencuentran con Jiji, con quien comparten un pasado turbulento.
Durante su huida, un miembro de la familia Kito ve a Jiji entre los transeúntes. Aunque no pueden ver a Momo, están seguros de que está cerca. La matriarca Naki Kito expresa su entusiasmo por el reencuentro, dejando claro que se avecina un gran enfrentamiento.
El capítulo termina con tensión en el aire: los Kito ahora persiguen a Momo y sus aliados hacia el Gran Santuario de Izumo, mientras el tiempo corre en su contra debido a las maldiciones que se intensifican rápidamente.
Dandadan está disponible en el de Manga PLUS .