El número 19 de la revista Weekly Shonen Jump, publicado el lunes 7 de abril, marcó el esperado capítulo 74 de Kagurabachi. Titulado "Amanecer", el episodio retoma los acontecimientos del enfrentamiento entre los espadachines, revela importantes detalles sobre el pasado de Samura y anticipa una batalla a tres bandas entre portadores de espadas encantadas.
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El capítulo 74 de Kagurabachi profundiza el vínculo entre Samura y su hija Iori, a la vez que da un nuevo enfoque al antagonista Yura, ahora miembro declarado del grupo Hishaku. El reencuentro entre ambos personajes revela viejos secretos y prepara el terreno para el próximo enfrentamiento entre Samura, Chihiro y Hiruhiko.
Enfrentamiento inminente entre héroes y villanos en Kagurabachi
El capítulo comienza con Samura siendo informado del asesinato de Kunishige Rokuhira y del robo de las Espadas Encantadas. La noticia llega a través de Kamunabi, la organización encargada de proteger a quienes portan estas armas. El plan inicial es escoltar a Samura hasta la sede de la entidad, pero todo cambia cuando Yura aparece en su puerta.
Afuera, los cuerpos de los agentes enviados yacen en el suelo. Yura se presenta como miembro del Hishaku y admite haber matado a uno de los espadachines. En lugar de intentar eliminar a Samura de inmediato, propone un trato. La conversación expone la creciente tensión entre las facciones involucradas en la Guerra Seitei y revela la intención del Hishaku de revertir la maldición infligida por la espada Shinuchi.
Según Yura, la estabilidad que Samura defiende es ilusoria. Las flores que surgieron tras la guerra aún florecen en una isla aislada, señal de que la maldición sigue activa. Para el villano, ignorar este fenómeno sería el mayor pecado del protagonista, ya que hasta entonces parecía ajeno a la persistencia del caos.
Alianza inesperada y regreso del pasado
A pesar de la desconcertante propuesta, Samura no la rechaza. Reflexiona sobre el riesgo de mantener a los Hishaku sueltos con espadas tan peligrosas. Al mismo tiempo, reconoce que la amenaza de Shinuchi podría resurgir mientras el espadachín viva. Con eso, acepta colaborar, un giro que deja la historia en suspenso respecto a los verdaderos objetivos del personaje.
El capítulo retoma la historia de Iori, la hija de Samura, quien fue acogida por la hermana de Inori tras sufrir acoso escolar debido al pasado de su padre. Seis meses después, miembros del grupo Masumi se acercan a ella y le proponen borrar su historia y ofrecerle una nueva identidad.
Iori recuerda momentos con su padre, incluyendo una carta en la que se disculpa por el sufrimiento que le causó. A pesar de todos los cambios, la joven no puede olvidar sus orígenes. Los recuerdos se intensifican en el momento en que se rompe el sello de la espada, señal de que algo grandioso está a punto de suceder.
La batalla de las espadas encantadas comienza en el capítulo 74 de Kagurabachi.
La acción regresa al presente mientras Iori se defiende de un grupo hostil, empuñando una espada real por primera vez. Aunque inexperta, demuestra la habilidad aprendida de Samura y demuestra que está dispuesta a luchar para reencontrarse con su padre.
Mientras tanto, Chihiro y Hiruhiko se preparan para el combate. Hiruhiko, herido previamente por Chihiro, decide continuar a pesar de las condiciones inminentes. A su lado, Toto le advierte que Samura vendrá por él si empuña una espada encantada.
Mientras tanto, Iori le pregunta a Chihiro si el cielo se oscureció por culpa de Samura. La respuesta, aunque incierta, sugiere que su padre la observa desde lejos. Chihiro le asegura que sus sentimientos no son en vano. En ese momento, los dos jóvenes espadachines desenvainan sus espadas simultáneamente.
El cielo, previamente pesado, se abre con la liberación de las espadas. La escena final muestra a Samura descendiendo del cielo con alas negras, similar a una figura angelical corrupta. Su llegada marca el inicio de una batalla a tres bandas entre los portadores de las espadas encantadas, que promete redefinir el curso de la historia.
Caminos cruzados y redención en juego
El capítulo 74 de Kagurabachi destaca los dilemas morales de Samura, la evolución de Iori y el desarrollo de la Guerra Seitei. La narrativa combina drama familiar, fantasía oscura y batallas estratégicas, creando una tensión intensa que promete un clímax en futuros números.
El inminente reencuentro entre padre e hija añade un matiz emocional a la trama. Mientras tanto, la alianza entre Samura y los Hishaku plantea interrogantes sobre la verdadera naturaleza de su arrepentimiento y las consecuencias de su decisión.
Con el escenario preparado para un enfrentamiento masivo, Kagurabachi se consolida como uno de los manga más intensos de la actual Weekly Shonen Jump. La presencia de espadas encantadas, ahora empuñadas por personajes con objetivos contradictorios, aumenta la expectación por los próximos capítulos.
